Peces libres de estrés

Hay diferentes factores que pueden estresar al salmón. Según el director de I+D de la división de Salud de los Peces, Henrik Duesund, estos retos también representan oportunidades de mejoramiento.

Todo ello se basa en un profundo reconocimiento de cómo las deficiencias en la salud y el bienestar de los peces repercuten en los resultados medioambientales y financieros", afirma Duesund.

Ya en 1965 se elaboraron las cinco libertades frente a los factores de estrés de las que deberían disfrutar todos los animales de cultivo, que posteriormente fueron adoptadas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE). Cermaq ha elaborado una política de bienestar basada en estos principios.

Aunque el salmón de cultivo no tiene la misma vida que el salmón salvaje, el ciclo de producción pretende emular las condiciones naturales, cumpliendo al mismo tiempo estas cinco libertades.

"La tasa de supervivencia del salmón de cultivo es tremendamente alta en comparación con lo que sucede en la naturaleza. Nada menos que lo que cabría esperar. Ya que en la naturaleza la tasa de supervivencia ronda el 5%, en nuestra piscicultura la tasa de supervivencia anual es del 95%. Nuestro objetivo es aumentar esa tasa de supervivencia", dice Duesund.

El salmón de cultivo tiene una dieta predeterminada en comparación con el salmón salvaje. No hay necesidad de cazar peces e insectos, y los peces reciben un alimento basado en la ciencia con todos los nutrientes necesarios, y no tienen que luchar por la comida. Aunque el salmón cultivado en el océano tiene mucho espacio en un corral, éste sigue estando limitado por una red", dice Duesund.

Las alteraciones y otros factores pueden causar estrés en los peces.

"El estrés es natural y una función fisiológica importante, ya que parte del estrés es positivo. Sin embargo, un estrés permanente de alto nivel cambia el panorama. El estrés crónico afectará con el tiempo a los procesos fisiológicos básicos del salmón, lo que puede hacer que el pez sea más receptivo a los patógenos que causan enfermedades", afirma Duesund.

Según Cermaq, un buen comienzo de vida es crucial para el salmón, ya que el estrés acumulado en los alevines y esguines reduce la capacidad de los peces para adaptarse a una buena vida en el mar.

Por lo tanto, los esguines deben tener condiciones óptimas, como una buena calidad del agua en su primera fase en agua dulce. "También debemos garantizar una esmoltificación homogénea y minimizar el número de manipulaciones en la fase de incubación", afirma Duesund.

La gestión preventiva de los caligus es muy importante para todos los salmoneros, y una forma importante de reducir la necesidad de tratamiento y, por lo tanto, el estrés. La optimización de los alimentos y la alimentación en aguas profundas, la comprensión de la biología de los caligus y el conocimiento intrincado de los centros de cultivo son otros factores importantes.

Las nuevas tecnologías que permiten el cultivo individual a través de aplicaciones como iFarm, que Cermaq está desarrollando, pueden ser una forma importante de reducir los niveles de caligus y la manipulación mediante la clasificación de los peces enfermos a través de sensores.

De este modo, los demás peces del corral no se ven afectados. La tecnología que separa al salmón del océano exterior, como los sistemas cerrados de Cermaq (SCCS y Certus), también reducen estos factores de estrés. Sin embargo, es importante garantizar que las nuevas tecnologías no introduzcan otros factores de estrés.

"Los esguines robustos son fundamentales para garantizar que el salmón pueda prosperar en el agua de mar. Esto comienza con la producción en agua dulce. A partir de la investigación y las evaluaciones, se han introducido cambios, por ejemplo, en el diámetro y la curvatura de las tuberías. Evitar situaciones de estrés para los peces es la base de la investigación y las operaciones de Cermaq", dice Duesund.